10/12/2004

Naturaleza Bloguera

¿Por qué una persona en su sano juicio publica cosas de su vida privada en un sitio en el que lo puede ver cualquiera? Pues no lo se, pero creo que muy cuerdos no estamos, pero me da lo mismo. Yo lo hice por moda, hay que ser sincero, y por vergüenza estuve meses sin escribir nada. Luego comencé poco a poco, muy lentamente a escribir.

Las Cinco del Viernes Sirvieron de mucho, tenías que postear una vez a la semana. Y así poco a poco fui haciéndome un habitual porteador.

Luego me enteré de que ciertas personas leían mi blog y durante un par de días me contuve y me daba reparo decir algunas cosas. Pero eso se me pasó enseguida, que al fin y al cabo tiene que conocer a su futuro yerno. Y así sigo, en plena explosión de posteo, y es que en el trabajo sufro de verborrea escritora.

¿Y el resto del mundo bloguero? Pues hay dos grupos, los que nos mantenemos fijos, posteamos habitualmente, mejoramos el blog y tal. Y luego están los de la moda bloguera, los que empezaron, pusieron como mucho cinco posts y luego silencio… bueno ya sabemos que la constancia no es una virtud muy extendida. Pero entonces mejor que no empiecen.

Y un tercer grupo es el de los cambiantes, que cuando se enteran de que alguien lee su blog lo cambian, como si nos fuesen a contar el secreto de la eterna juventud, pues muy bien, ellos mismos.

Yo por ahora me mantendré aquí, que es muy sencillito de usar y funciona muy bien. Y seguiré con mi frecuencia alta de posteo y si algún día cambio, ya informare debidamente.