No pesan los kilos, pesan los años

Solo se me ocurre a mi, ayer por la mañana para liberar tensiones, hacer un poco de ejercicio y par disfrutar del buen día que hacia, decidí irme al polideportivo de al lado de casa con mi pelota de baloncesto, a tirar unas canastas y a mover un poco el culo.

Estuve 20 minutos, cuando veo que se acercan cinco chavales, calculo que el mayor tendría 16 años, una media de 2 metros. Lo primero, me llaman señor… ¿a mi? Mal empezamos… bueno me dicen que si les ayudo a completar uno de los equipos. Por mi perfecto. A todo esto en el otro equipo esta el típico chulito, que piensa que es el mejor… asi que les digo a mis compañeros que ese me lo quedo yo.

¿Y del partido? Pues una hora de partido, victoria de mi equipo sin muchos problemas, el orgullo del chulito por los suelos y yo… con la lengua fuera. Pero, ¿qué les dan de comer a estos críos?

Ya no tengo edad para hacer estas cosas muy a menudo, pero lo seguiré haciendo. Porque lo de humillar al chulo de turno ha sido muy divertido.

No le dejaba recibir casi nunca, si recibía, le presionaba a muerte y si intentaba tirar, tapón al canto… jajajajajajaja. Estaba desesperado, ha metido solo una canasta… Y una de las veces, en un corte por la zona se he encontrado con un muro, conmigo, ha tardado cinco minutos en recuperarse.

Porque ya se sabe más sabe el diablo por viejo que por diablo…